«La aventura de Sade reviste una amplia significación humana. ¿Podemos satisfacer nuestras aspiraciones a la universalidad sin renegar de nuestra individualidad?, ¿o sólo podemos integrarnos en la colectividad mediante el sacrificio de nuestras diferencias? Este problema nos afecta a todos. En Sade, las diferencias se exageran hasta el escándalo, y la inmensidad de su trabajo literario nos demuestra con cuánta pasión deseaba ser aceptado por la comunidad humana: en él encontramos, pues, bajo su forma más extrema, el conflicto que ningún individuo puede eludir sin mentirse a sí mismo. Aquí está la paradoja y, en cierto sentido, el triunfo de Sade: en que por obstinarse en sus singularidades nos ayuda a definir el drama humano en su generalidad.»
Simone de Beauvoir
¿HAY QUE QUEMAR A SADE?
AUTOR/A
BEAUVOIR, SIMONE DE
Nacida en una familia burguesa, Simone de Beauvoir fue educada según la sólida moral cristiana vigente en la época. Cuenta en sus memorias la fuerte impresión que le causó, en su juventud, descubrir el ocaso de la religión: dejar de creer en Dios era asumirse plenamente responsable de sus propias elecciones. En 1929, después de conocer a Jean Paul Sartre en la Sorbona, donde ambos estudiaban filosofía, se unió estrechamente al filósofo y a su círculo (en el que se encontraba Paul Nizan, autor de "Adén, Arabia"). Con el tiempo, crearon entre ambos una relación que les permitía compatibilizar su libertad individual con la vida en común.<BR><BR>Simone de Beauvoir fue profesora de filosofía hasta 1943 en escuelas de diferentes lugares de Francia, como Ruan y Marsella. Durante la Segunda Guerra Mundial y la ocupación alemana de París vivió en la ciudad tomada escribiendo su primera novela, La invitada (1943), donde explora los dilemas existencialistas de la libertad, la acción y la responsabilidad individual, temas que aborda igualmente en novelas posteriores como La sangre de los otros (1944) y Los mandarines (1954), novela por la que recibió el Premio Goncourt y que se considera la más importante de todas sus obras.<BR><BR>Las tesis existencialistas, según las cuales cada uno es responsable de sí mismo, se introducen también en una serie de obras autobiográficas, cuatro en total, entre las que destacan Memorias de una joven de buena familia (también conocida como Memorias de una joven formal) (1958) y Final de cuentas (1972). Sus obras ofrecen una visión sumamente reveladora de su vida y su tiempo. Entre sus ensayos escritos cabe destacar El segundo sexo (1949), un profundo análisis sobre el papel de las mujeres en la sociedad y la construcción del rol y la figura de la mujer; La vejez (1970), centrada en la situación de la ancianidad en el imaginario occidental y en donde critica apasionadamente la marginación y el ocultamiento, y La ceremonia del adiós (1981), polémica obra que evoca la figura de su compañero de vida, Jean Paul Sartre.<BR><BR>Se suele inscribir la obra de Simone de Beauvoir, exclusivamente, en la evolución del feminismo. Con ello se corre el riesgo de olvidar sus reflexiones sobre la creación literaria, sobre el desarrollo de la izquierda antes y después de la Segunda Guerra Mundial, sobre el dolor y la percepción del yo, sobre los linderos del psicoanálisis y, por supuesto, sobre las premisas profundas del existencialismo.<BR><BR>En 2008 se creó en su honor el Premio Simone de Beauvoir por la Libertad de las Mujeres, más conocido simplemente como Premio Simone de Beauvoir.<BR><BR>wikipedia